La Primera Flauta
Un cazador se perdió, alguna vez, en alguno de los laberintos de la selva amazónica.
Después de mucho vagar, se dejó caer al pie de un cedro y allí se quedó dormido.
Fue despertado por el sol y por una música jamás escuchada.
Entonces, el cazador perdido descubrió que un pájaro carpintero, de cabeza roja, largo cuello y pico poderoso, estaba picoteando una rama.
La música nacía del viento que entraba por los agujeritos que el pájaro excavaba.
El cazador aprendió. Imitando al viento y al pájaro, creó la primera flauta americana.
palabras del gran Eduardo Galeano
Fuente:
El Cazador de Historia. Eduardo Galeano. Siglo Veintiuno Editores, 2016